Botas para perros, son un complemento imprescindible para su cuidado
Las botas para perros no sólo son una prenda de moda para el frío. También protegen las patas de tu amigo del hielo, la nieve, la sal y los productos químicos descongelantes cuando sale a pasear por el vecindario o por un paraíso invernal helado.
Si tienes que lidiar con inviernos nevados, es importante que enseñes a tu cachorro a sentirse cómodo con los zapatos para perros, de modo que pueda estar seguro, abrigado y listo para divertirse cuando haga frío.
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La importancia de las botas para perros en invierno
Las botas de nieve para perros protegen las patas del hielo, la nieve y otros peligros invernales. Cuando busques calzado para tu can, recuerda que no todas las botas para perros son iguales. Algunas están diseñadas para recorrer senderos rocosos y todoterreno. Otras se utilizan para proteger las patas lesionadas. Y otras, están pensadas específicamente para proteger las patas del hielo, la nieve y la sal.
A veces, el suelo está tan frío que caminar sobre él puede dañar las almohadillas del perro, y para los perros que caminan por una acera, la sal puede quedarse atrapada entre los dedos de los pies.
Al igual que cuando te duelen las manos o los pies, sientes hormigueo y entumecimiento cuando están expuestos a temperaturas gélidas, a tu perro también le pueden doler las patas y sentir hormigueo. Imagínate caminar descalzo sobre hielo durante mucho tiempo. Esto ocurre porque cuando camina sobre suelo frío, los vasos sanguíneos de sus patas se estrechan para ayudarle a conservar el calor en el núcleo de su cuerpo. Si los vasos sanguíneos permanecen estrechos durante mucho tiempo, la reducción del flujo sanguíneo puede dañar los tejidos y provocar congelación.
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La amenaza de congelación no es la única preocupación. La sal y los descongelantes químicos, sobre todo el cloruro sódico y diversas sales cálcicas, que se emplean para derretir el hielo de aceras y calzadas pueden irritar las patas y la piel de tu perro, e incluso provocar quemaduras químicas en situaciones extremas. Las botas para perros evitan que la sal se acumule entre los dedos o se adhiera a las almohadillas.
Consejos para que tu perro se sienta cómodo con las botas para perros
Puede que a nosotros nos resulte sencillo entender por qué son importantes las botas para perros en condiciones de hielo y nieve, pero puede que las mascotas necesiten un poco más de convencimiento.
Si tienes un perro acostumbrado a que lo manipulen y a llevar abrigos y cosas por el estilo, puede ser fácil ponerle las botas, pero es ciertamente patético cuando los perros no pueden moverse con las botas puestas.
Para enseñar a tu perro a sentirse cómodo con las botas, sigue estas instrucciones de adiestramiento canino paso a paso.
Si nunca has tenido que enseñar a tu perro a permitir que le manipule las patas, debes empezar a adiestrarlo desde ahí. Cuanto más despacio se trabaje este proceso, mejores serán los resultados. El adiestramiento debe ser de 5 minutos cada vez, en días alternos.
Trabaja con un pie cada vez hasta que tu perro se sienta relajado cuando manipulas sus pies. Con paciencia (¡y golosinas!), tu perro debería sentirse cómodo con que le toques las patas más pronto que tarde.
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Una vez que tu perro acepte que le toques las patas, podrás empezar a sentirte cómodo con sus nuevas botas. Primero hay que enseñarle las botas y luego dejar que las huela. También puedes poner las botas junto a su comida, lo que le enseñará a asociar los zapatos con cosas buenas, como la cena.
Cuando las botas hayan superado la prueba del olfato de tu perro, pasa a frotar el material en la pata de tu cachorro. Frota el material en su pata y, por supuesto, acompáñalo con comida.
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Después de introducir con éxito las botas a tu amigo, ¡estarás un paso más cerca de la puerta! Una vez que hayas dado todos estos pasos y tu perro mueva la cola al ver las botas, pónselas, dale algún premio y quítaselas, haz esto unas cuantas veces y recompensa al perro si sale a caminar.
Repite este proceso con las cuatro botas hasta que consigas ponérselas todas al perro al mismo tiempo. Una vez que se sienta cómodo con las cuatro botas puestas, es hora de salir al exterior.
Cuando todo lo demás falle, vuelva al paso anterior. Si, en algún momento, el perro se resiste o se asusta, detente y vuelve al paso anterior de mayor éxito en el adiestramiento.
Las botas para perros no son como un juguete nuevo; tu mascota tardará algún tiempo en acostumbrarse a ellas. Es vital introducir las zapatillas para perros al ritmo con el que tu can se sienta más cómodo para que se acostumbre a sus escarpines.
Si se niega a ponerse los zapatos, deja de intentarlo durante una semana, Reevalúa lo que estás utilizando como recompensa: ¿Sería mejor un juguete? ¿Queso gorgonzola?».
Consejos de seguridad y precauciones con los zapatos de perro
Puedes encontrar muchos estilos de calzado que se adapten a la personalidad y necesidades de tu amigo. Sin embargo, independientemente de lo de moda que estén, elije botas de invierno para perros que sean impermeables y con suelas texturizadas para ayudar a tu mascota a mantenerse firme sobre el hielo resbaladizo.
Cuando le pongas a tu mascota botas o zapatos para perros, asegúrate de que no le aprieten ni le queden demasiado holgados. Para conseguir el mejor ajuste, mide la anchura y la longitud de la pata de tu perro mientras está en el suelo. Asegúrate de medir en los puntos más ancho y más largo, incluidas las garras.
Inspecciona periódicamente el calzado de tu amigo para asegurarte de que no presenta rasgaduras, agujeros u otros signos de desgaste extremo. Asegúrate de que los cierres de velcro funcionan y las suelas son sólidas.
Los perros con botas, especialmente cuando aún están aprendiendo a caminar con ellas, pueden ser un espectáculo gracioso de ver. Pero las botas y los zapatos para la nieve protegen las patas de tu amigo de las temperaturas gélidas y los productos químicos descongelantes, lo mantienen abrigado y cómodo, y le permiten pavonearse durante todo el invierno.
